SUEÑOS IMPOSIBLES

Afrontamos día a día decisiones, espontáneas o premeditadas, pero en definitiva decisiones que, aunque parecen triviales, determinan la dirección que seguirá nuestra vida y definen numerosos cambios en nuestro futuro. Esas alteraciones en la linealidad de la vida pueden ser negativas o positivas, aunque para algunos solo existan las primeras.

La vida nos ofrece oportunidades, millones y millones de situaciones que cambiarían todo a mejor si tan solo supiésemos elegir la opción correcta.

Pero justo en esos momentos tan decisivos nos abruman las dudas. Logran ofuscar nuestros pensamientos con miles de consecuencias intransigentes y ficticias que, aunque sabemos que son improbables, tomamos como referencia a la hora de escoger. Y, de forma irracional, repetimos una y otra vez la misma frase: “Voy a equivocarme”.

Precisamente es en esos instantes cuando más impertérritos deberíamos permanecer. Tenemos que pensar con plenas facultades y es imprescindible, por supuesto, que nadie nos coaccione para que nuestra elección sea en su beneficio. Solo piensa en ti, sé egoísta si es necesario, pero jamás dejes que otro escoja en tu lugar.

Así que aparta las vacilaciones y dile a esa persona tan especial que la amas, corre y cómprate esa mascota que deseas, decide ya qué quieres hacer en tu futuro, cuéntale a tu madre la verdad sobre su marido, llama a tus amigos y monta una fiesta…
Pero recuerda, tú eliges. Es tu oportunidad, no la desaproveches
Valentin Gonzalez